La XV Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo ha arrancado esta semana con la presentación al público de los veinte proyectos que han sido destacados, entre los que sobresalen, la reconversión del recinto Fabra i Coats, en Barcelona, una escuela infantil en Sevilla y un edificio dedicado solo a viviendas de protección oficial en Cornellà de Llobregat (Barcelona). Según explicó el jurado: “Son obras que responden a los retos de la sociedad, que se vinculan y enraízan con los lugares donde se asientan y que aportan soluciones para mejorar el contexto social y cultural en el que operan”. Se podrán contemplar en el Pabellón Mies van der Rohe de la Ciudad Condal, que acoge una de las muestras, que se mantendrá abierta al público hasta el próximo 16 de septiembre. Como ya informó el diario La Razón hace unas semanas, el lema de este año será “España Vacía, España Llena. Estrategias de conciliación” y este el tema principal que ocupará la exposición que albergará el Museo del Patio Herreriano de Valladolid, que se podrá visitar hasta el 10 de octubre.

El evento, coordinado por Óscar Ares y Anna y Eugeni Bach, se ha centrado en uno de los temas que más conversaciones y debates está levantando estos últimos años: La España vacía. De esta manera se quiere provocar un diálogo entre dos realidades que son antagónicas. Por un lado, la gran ocupación de las urbes y la progresiva desocupación del campo debido a la inmigración, el envejecimiento de los habitantes y el abandono ante las imposibilidades laborales que plantea en ocasiones. La gran pregunta que se plantea es “¿Cómo debe abordar la arquitectura estos hechos?”. Pero, también, ¿cómo hay que repensar la vivienda en lugares tan opuestos?

El Patio Herreriano alberga una larga exhibición que propone respuestas y trata de marcar una dirección. Está dividida en dos partes. La primera, está ubicada fuera, y acoge diez estructuras de metal que recogen imágenes de los trabajos que han sido galardonadas en “Panorama de Obras de Arquitectura y Urbanismo”. Las imágenes han sido realizadas por el artista Jordi Bernardó. Pero donde se hace más hincapié en este asunto es en el interior de esta sede. Lo hace a través de una pieza que recibe el nombre de “Campo/contracampoflaneur360″, que intenta arrojar una mirada más larga, detallada y profunda de cada uno de los proyectos presentados, además de hacer hincapié en sus particularidades, las dificultades afrontadas y en las maneras que se ha planteado superarlas. “Tiene la firma voluntad de dejar un testimonio ante la belleza de las obras arquitectónicas”, se dice aquí. “Una reivindicación real, honesta y respetuosa de la belleza imprevista que la arquitectura puede crear a su alrededor”.

 

Fuente: Larazon.es